La recepción organizada en el buque de la marina que se encontraba en el muelle 30 junto al Bay Bridge, estaba programada para las 7pm. Debido a que "la señora cubana" no encontraba su rimel y hubo necesidad de parar para conseguir uno, cerca de las 7:45pm recien pudimos llegar al muelle designado.
Despues de estacionar y caminar rumbo a la escalinata que daba ingreso al buque, vimos como muchas personas caminaban en dirección contraria a la nuestra y no se veian muy contentos por el hecho. Al llegar a la escalera de ingreso, nos dimos con la sorpresa de que la capacidad de invitados al buque habia llegado a su limite y que ya no era posible el ingreso, por lo menos no hasta que algunas personas se retiren del evento para que la gente esperando fuera del barco pudiera ingresar. Al parecer este era el motivo del descontento general de muchas de las personas que en ropa de gala esperaban en plena noche de invierno el ingreso al buque.
Por unos segundos pense... oops, creo que nos vamos a perder "La Fiesta". Pero la realidad era diferente ya que nosotros contabamos con invitaciones Oficiales que habia obtenido mediante el Consulado Peruano. Asi que el ingreso no fue un problema. Asi que despues del saludo protocolar de rigor a los oficiales encargados de recibir a los invitados y de las pifias de algunos que esperaban fuera del barco para poder ingresar, caminamos por la cubierta del buque rumbo a la sala principal.
Fue ahi donde fuimos interceptados por dos de la "pandilla marinera" que habiamos formado hace unos dias. Y diciendo "Ahora nos toca a nosotros", nos escoltaron por el barco hasta la sección principal del buque... nos llevaron directo al bar que se encontraba repleto de Cuzqueñas, Pilsen Callao y Pisco Sour entre otros. El resto de la noche ellos se encargaron de que siempre tuvieramos en la mano alguna bebida y que en ningun momento estemos con un vaso vacio.
Mientras bailadores de tijeras hacian gala de sus malabares en el centro del salon principal, era momento de ser mas sociable y saludar amigos y extraños presentes en la gala. Es que no todos los dias la Marina de Guerra del Peru viene a San Francisco y organiza un evento de este tipo, asi que la sociedad peruana entera se hizo presente esa noche al igual que otros funcionarios importantes de la ciudad y otros paises.
Entre embajadores, diplomaticos, politicos, artistas, arquitectos y escritores encontre a mi persona favorita en una muy amena conversación con la gente de su entorno. Despues de la interrupcion inoportuna y la s disculpas de rigor, la rapte por unos minutos y la lleve a la zona del museo instalado dentro del buque. Ahi me asegure de presentarla a la "pandilla marinera" y asegurarme que recibiera el mejor trato de la noche. Acto seguido y luego de recibir los saludos protocolares de la "pandilla marinera", era momento de tomarme una foto con ella.
Mi madre y yo.
Tiempo de volver a la sala y mientras la Marinera bailada en el centro robaba la atencion de los presentes, el olor que empezo a inundar el salon me decia que era hora de incrustar el diente en aquellos platos de comida peruana servidos en ollas de barro que la gente de Prom Peru habia decorado de forma muy apetitosa. Nuevamente, no hubo necesidad de esperar para comer. La Pandilla Marinera se encargo de que degustaramos todos los potajes y que repitieramos postre... yumi!
Una de las mayores sorpresas de la noche me la di al regresar por el tour privado que La Pandilla nos dio del buque. Tour que por razones de seguridad no pude fotografiar y que ademas es prohibido para civiles. Al regresar del tour escucho alguien diciendo
- Guerra???... Eres tu?
- perdon?
- Como te llamas?
- Luis
- Luis Guerra?
- si... y tu eres?... aguanta... espera... no.. no me digas... NOOOOOOOOOOoooooooooooooooo
Y fue asi, con mandibula en el suelo, que encontre a un compañero de aulas cuando pase por el Colegio Claretiano en Lima. Pero mas gusto me dio el verlo convertido en un Funcionario Diplomatico. Ademas, demostrando lo pequeño que es el mundo, en ese momento nos dimos cuenta que teniamos muchos amigos en comun dentro del Consulado y la Cancilleria. Por la emoción del encuentro no pude tomar fotos del encuentro, pero el gusto nadie me lo quita.
La fiesta duro largo y tendido, ademas el barco es jurisdiccion peruana por lo cual el fumar dentro y tomar despues de las 2am estaba permitido como el decalogo del bebedor nacional lo indica.
La Pandilla Marinera se porto excelentemente y en todo momento se preocuparon de que estuvieramos bien atendidos y entretenidos. Pero lo que mas me gusto de la experiencia fue esa sensacion que a uno le da en el pecho motivo del orgullo que da el ver a un grupo de jovenes que si bien saben como divertirse sanamente, tambien saben muy bien como defender la patria y hacerla respetar. El verlos caminar por la calle y ver como la gente se paraba de sus asientos y los saludaban de forma militar, les invitaban bebidas y comida, los abrazaban y les agradecian por representar a su pais de origen... esa imagen quedo registrada en mi cerebro por siempre. Esa sensacion de orgullo que uno siente cuando la gente respeta tu pais y origen no es algo a lo que uno llegue a acostumbrarse.
No, no estoy de acuerdo con la Guerra ni la justifico de ninguna manera. Tampoco creo que la violencia sea la forma de resolver ningun tipo de conflicto y en lo personal considero que el presupuesto invertido en las fuerzas armadas podria ser usado en otro tipo de fines. Pero ver la pasion y la admiracion con la que estos chicos hablan de su patria me hace pensar que tal ves la presencia de las fuerzas armadas es mas necesaria de lo que siempre he pensado.
Las Fuerzas armadas ya no representan sinonimo de violencia para mi. Ahora son una cantera de nacionalismo y orgullo patrio.
Juanito, sobrino de un gran amigo y nuevo gran amigo, entre Michelle y Yo.
ok ok .. como que el nacionalismo se me ha subido un poco a la cabeza. Pero bueno... tan nacionalista no puedo ser ya que ando en California en lugar del Peru. Asi que mucha atencion tampoco me pongas.
L.
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