El matrimonio se realizo junto al mar y el icono mas importante de esta ciudad. Pero lo que nadie me dijo, es que para llegar hay que caminar 45 minutos por la playa. Y menos aun que el viento marino es 500 veces mas frio que el regular. Pero a pesar de las complicaciones, pude llegar.
El French (Gui), Daniel (El Novio), Luis (El peruano congelado)
Ole (El otro novio) y El Peruano
La torta (el pastel) era simple y conciso. Exactamente como la personalidad de los novios. Sin embargo mi preocupacion era... alcanzara para los demas? porque despues de haber caminado por la playa y con la brisa marina, el las tripas estomacales estaban dando una sinfonia que me hacia predecir que yo terminaria comiendo la mayoria de ese pastel.
Momento del brindis... bla bla bla... hasta ahora todo igual que en cualquier otro matrimonio tradicional. Mas mimosas por favor!
Finalmente, el momento que yo tanto esperaba. El bouquette.
Mi dilema personal era, quien lanzaria las flores? quienes tomarian las flores? Para mi suerte, no paso mucho tiempo antes de encontrar respuesta a mis dudas. Daniel y Ole pidieron que todos los solteros presentes (sin importar genero ni orientacion sexual) se colocaran para recibir las flores. Acto seguido, ellos juntos y al mismo tiempo... lanzaron las flores.
Momento de cortar el pastel... y mis tripas lo agradecieron eternamente.
Tiempo de retirarse y caminar otros 45 minutos por la playa hasta encontrar civilizacion nuevamente. Pero ahora si iba preparado. En mi estomago llevaba 4 pedazos de pastel y 8 vasos de mimosas.
ps: Gay o Straight no importa. Esa tarde todos concluimos en 2 cosas muy importantes. La primera... el rostro de felicidad de los novios es el mismo que siempre hemos visto en cualquier matrimonio. Y la segunda... de ahora en adelante, los 2 se pondrán gordos :)
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