No es la primera ves y tengo el presentimiento que tampoco será la ultima. Una de las experiencias que más recuerdo es saliendo de la universidad en Lima hace algunos años. Ese día recibí la llamada de unos amigos y quedamos en encontrarnos por unos tragos en mi casa. Como buen estudiante universitario que recibe una oferta hacia el alcoholismo, decidí salir temprano de clases para poder ir a la casa y tener todo listo para la mini-reunión. 15 minutos después de haber llegado, llegó la pandilla de borrachos armados con el peor arsenal que 30 soles puede conseguir en un select de Shell. Fue ahí cuando escuchamos la explosión. No recuerdo que fue primero, el ruido de las ventanas vibrando o el ruido de la bomba explotando en el centro comercial El Polo. Lo que más recuerdo es el sonido de las alarmas de autos y la gente corriendo hacia las calles.
Casi nunca pienso en ese día, pero ayer fue una excepción.
El día martes había estado tarde para trabajar, así que el miércoles salí de casa 30 minutos antes de lo normal. Una especie de auto-castigo psicológico por no haber sido responsable el día anterior. La ruta del tren es de este a oeste, siendo mi destino el centro de la ciudad de San Francisco. A mitad de camino, se escucha un mensaje por los parlantes del tren.
“Debido a una situación policial el servicio de trenes hacia la ciudad de San Francisco ha sido interrumpido indefinidamente, por favor esperar hasta un próximo aviso”.
Eran las 8:20am y estaba atrapado junto a cientos de personas en el tren sin poder salir. Mientras seguía leyendo el diario del día, no sé cuantos minutos habrán pasado, pero finalmente el tren empezó a moverse nuevamente. Llegamos a la siguiente estación, pero el tren no abrió sus puertas. Nuevamente escuchamos otro anuncio por los parlantes del tren.
“Este es una anuncio de Emergencia Policial, por favor abandonar el tren y esperar por una próxima comunicación... thank you”
La palabra “emergencia” no fue del agrado de nadie, pero todos tuvimos que abandonar los trenes y esperar en la plataforma dentro de la estación. Fue ahí donde me di cuenta que la situación era mas complicada de lo que originalmente pensaba. Al mirar el entorno, vi cerca de 6 trenes de 10 vagones cada uno, estacionados. No pude contar exactamente cuantas personas estaban varadas, pero luego me entere por las noticias que fue un aproximado de 20'000. Nadie sabia lo que estaba pasando y poco a poco el pánico empezó a brotar.
Se escuchaban varios rumores, pero 2 eran los mas fuertes, incendio y terrorismo. Me entere que la semana pasada había habido un incendio en uno de los túneles (justo el mas largo y el que se encuentra bajo el agua). Lo del terrorismo era obvio pensar, sobre todo por el trauma que tiene la gente en este país sobre los ataques. Esperamos cerca de 1 hora y fue ahí donde comprendí que la histeria colectiva si existe. No se como explicarlo, pero el escuchar tantos comentarios, ver tanta gente asustada y algunos corriendo hizo que sintiera miedo. Estuve asustado por no saber que pasaba.
Pasadas las 9am anuncian por los parlantes del tren que “la emergencia” había terminado y que podíamos retomar nuestra ruta en el tren. Nunca dijeron que había pasado y tampoco si el túnel que nos lleva a San Francisco, el mismo que se encuentra bajo la bahía, bajo millones de litros de agua a cientos de metros bajo la tierra, el mismo que se incendio hace una semana, nunca dijeron si el problema era ahí o no. Lo que si se, es que fue la primera ves que vi a todos los pasajeros del tren mirando por la ventana cuando cruzábamos el túnel. Nadie leía el diario, conversaba o escuchaba música... todos concentrados mirando a traves de las ventanas las paredes obscuras del tunel.
Hoy por la mañana camino al trabajo, compro el diario nuevamente. Bush no piensa retirarse de Irak, el costo de construcción de un nuevo puente se elevo a los 2 billones de us$, niñera que abuso de un bebe de 2 meses se encuentra en prisión, servicio de trenes de San Francisco (BART) fue cerrado por presencia de bombas en estación previa al túnel de ingreso a la ciudad.
No tuve tiempo para reaccionar, el tren había entrado al túnel de ingreso a la ciudad.
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